Beyond Heaven And Hell

"Me Conoces?"
La Puerta Beyond HvN&Hll
1000 Caracteres
My Graveyard...
...Alice...
Game Over

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“Me Conoces?”

 

 

Entonces fue que lo encontré… entre vendas ensangrentadas, cortinas quemadas, ropas sucias y maltratadas, varias botellas de licor tiradas por todo el apartamento…

Un olor característicamente particular… muerte vieja… Es una peste poco descriptible.

Me acerqué, y quité aquella tela bañada en sangre que cubría su rostro…y entonces lo ví. Examine sus manos, sacudí un poco sus ropas, extrañamente empolvadas. Una de las imágenes mas perturbantes que he visto en mi vida. Verás…su rostro era viejo y demacrado, casi hasta los huesos, su piel estaba reseca, se desmoronaba al tacto. El hecho es que… sonreía, como si hubiese disfrutado lo que le pasó. Pero nada de eso es lo que describo. Después de observar su sonrisa, subí un poco más la mirada… Irónico, por que él no la tenía. Al llegar al sitio donde termina la nariz, note entonces que…

Le habían arrancado los ojos. Y no me refiero a que con cuidado quirúrgico se los habían removido… no; materialmente, se los habían arrancado… incluso faltaban partes de la frente y los parietales; había sido hecho con garras, y con una fuerza brutal…

Aun así, otro detalle era faltante…Mencione que su piel estaba reseca? Bien, pues las heridas en los ojos (o lo que quedaba de ellos) estaban frescas… y sangrantes, tan frescas que aun supuraban. Volví a tapar el rostro de aquel sonriente infeliz con la tela; después, tome el licor que quedaba y lo vertí en sus ropas. Dí un leve vistazo al entorno y, casi por error, note que en la pared estaba escrito: “Me conoces”. Al acercarme más al muro, ví con qué estaba escrito, la sangre del tipo, junto con lo que alguna vez fueron sus ojos, en el piso, deshechos, usados para escribir eso… Acaso era un simbolismo…?

Dí la vuelta y le prendí fuego al licor, quemando al sujeto. El apartamento también se quemó, junto con el resto del edificio… abandonado, por supuesto.

 

Qué, o quién pudo hacer algo así, era simplemente… medieval, muy rudo para esta época, muy… carnal.

Llegando a casa, me deshice de mi ropaje, que portaba aquel hedor, penetrante y melancólico. No dejaba de pensar en el porque de la sonrisa del sujeto. Quién sonreiría por algo así? Pero la respuesta nunca llego. No así, el porqué de su piel reseca y heridas frescas, y lo escrito en el muro.

…Un simbolismo… las heridas que nunca sanan, a pesar del tiempo…Las heridas del alma… y del corazón. Pero… por qué? “Me conoces”…? A quién conozco?... y, si el mensaje no era para mi? Ahora bien… como logró envejecer el rostro del sujeto? Eso correspondía a una fuerza superior, posiblemente superior a mi entendimiento. Fui hacia el baño y encendí la luz, levante la tapa del retrete, y ví mi reflejo en el agua, de pronto, sentí un cosquilleo insoportable en la garganta, y abruptamente tosí, sofocándome, escupiendo una sustancia ennegrecida… la ceniza y el hollín del edificio en llamas, que contemple mientras se quemaba, y del cual me aleje a la llegada de los bomberos y curiosos que surgieron cuales ratas a la carroña. Me dirigí al lavabo y mojé mi rostro, levante la vista al espejo, y mientras contemplaba como las gotas recorrían mis mejillas, meditaba. Por qué? Quién haría tal cosa? Por qué habría escuchado aquel estruendo cuando, pasadas las 2 a.m., yo recorría la acera junto a ese edificio? Por qué subí las escaleras para encontrar tan mórbido espectáculo. Sin respuesta o suposición, salí y fui a reposar en el único sillón de la sala, encendí un cigarrillo y cavilé en lo ocurrido, tratando de entender.

En algún momento, después de terminar el cigarrillo, caí dormido. Me pareció haber soñado lo sucedido. El sujeto, caminaba ebrio por la misma acera descrita, buscando un refugio para su embriagada soledad. Subió las escaleras hasta dicho departamento, abierto al estar abandonado, obscuro y hediondo. Caminó y llego a un cuarto, con una ventana de la cual se apreciaba la ciudad en su desorden lumínico. Se recargó en la ventana y, brindando con la urbe, lo dedicó a la inútil vida que portaba. Se sentía como reconfortado, pensando en que había llegada hasta ese lugar guiado por el susurro de una voz femenina, una sombra que lo empujaba hacia esa habitación. Brindando una vez más con la botella de licor barato, sintió la presencia de alguien detrás de él. En su alucinación, vio que la sombra tenia mas forma de la que aparentaba. Lo tomo del cuello y, de alguna forma, lo hizo sonreír.

Lanzándolo contra el suelo, en el sitio donde lo encontré, y aun sonriendo, brindo con la sombra que, con un rápido movimiento, lanzo un manotazo hacia su sien, arrancándole ojo, frente y cerebro, seguido de otro inmediato en el lado contrario, removiendo lo que quedaba. Extrañamente, toda la sangre de su cuerpo salio por esas heridas, secándolo, por eso las heridas estaban frescas y su piel reseca…y aun… sonreía.

Así, la sombra, con las “manos” bañadas en ello, se acercó al muro, escribiendo con movimientos iracundos tal mensaje. La sombra sale de la habitación, y como si yo estuviese ahí, voltea hacia mi, dejándome ver un ojo, profundamente obscuro y lagrimeante… Desperté después, por el tocar de alguien a mi puerta, un toquido seco e insistente. Fui hacia la puerta y la abrí, encontrando el vació corredor, que soplaba con el mismo hedor de aquel edificio… El sol ya había salido, y la noche se fue con el recuerdo de aquel sueño, pero no así con las imágenes que me había dejado, aturdido y enredado entre los sentimientos que me habían quedado, y el hecho que presencié. Pero en verdad, el hecho fue que las imágenes, lo que ví en aquel sueño, no me atemorizaba, si no que me producían… melancolía, añoranza, y sobre todo… tristeza.

Lo conozco, la conozco, algo es lo que conozco, pero qué? Y me advertí que tan rápido como pensaba eso, la noche volvió a caer. Mi nombre, tan confuso como lo que sentía, salía sobrando, como esta línea, pero aun así, no lo recordaba. Salí a la calle y volví al edificio, ahora en ruinas, y me adentre en él. No lo note de inmediato, pero escuche de nuevo el susurro del sueño, que me guiaba hacia la misma habitación. No lo entendía, pero así continué. Camine hacia la misma ventana, contemplando la vista que la noche anterior vió el sujeto cegado, sin encontrar nada. Un frió recorrió mi espalda y, al voltear, la misma sombra. No sabía como reaccionar, así que no hice ningún movimiento, mas pregunte, y para mi sorpresa, obtuve respuestas, quizás demasiadas:

 

-“Quién eres?”-dije con voz titubeante y entrecortada –“Acaso es que te conozco?”

-”No lo sabes? O es que no deseas recordar? Recordar que sabias quién soy y ahora has querido olvidarme… “ -dijo con voz espectral fríamente.

-“No, no lo sé. De saberlo no lo preguntaría. A caso te he visto antes…?”

-“Claro que me has visto antes. Me haz visto en el amanecer de un nuevo día. En el susurro del viento cercano al riachuelo. En el amamantar de la fiera a sus cachorros. En la carta anhelada. En el regalo ofrecido. En la caricia maternal. En el regaño fraternal. En la visión del porvenir. En la última palada de tierra que cierra la tumba. En el ser que la abriga. En el nombre que invocan los fervorosos. En éste sitio. En aquél. En el licor del mendigo que cegué. Enfrente de ti…justo ahora…”

-“No te entiendo. Que has hecho por mi? Por qué supones que sé quién eres?”

-“…mmm. De modo que no me recuerdas? Y si te menciono aquélla, a quién tuviste que reconocer en aquélla camilla, sangrante y fría, pálida, ya sin vida. Aquélla a quién tontamente dijiste por última vez una frase absurda de despedida, suelta y falta de candor… Aquélla, a quién estabas dispuesto a unir el resto de tu vida, y que dejaste en el profundo silencio de tu partida, cuando lo único que ella anhelaba, y necesitaba era sentir un sincero y calido abrazo de tu parte… Que eso era lo único que necesitaba para marcharse tranquila… La recuerdas?...”

-“Cállate!!! No vuelvas a mencionarla!!!”

-“Por qué? Acaso estas… si. Estas llorando… por qué? Por qué los humanos lloran cuando han perdido a alguien en tales términos. Saben a caso, que no se sentirían de tal modo si tan solo hablaran con las personas que mantienen a su lado? Si les dijeran lo que sienten? En principio… saben que no ganan nada después… llorando?”

-“No lo sé, no tengo idea de lo que pase con otras personas, pero se por qué es que yo reacciono como lo que hago, y es precisamente por lo que acabas de decirme, por no hablar cuando pude, y por desperdiciar, callando, el tiempo que con ella tuve, deliberadamente, tontamente.”

-“Ahí lo tienes, así es que por eso lloran… Por arrepentimiento… Por fin encuentro la razón por la que los castigo. Dime… cuánto tiempo llevas viviendo solo, de esa manera?”

 

 

-“Desde que ella murió, hace ya tres años” - Dije dificultosamente mientras añoraba-

-“Y fue entonces que decidiste vivir así, en melancolía de su recuerdo. De acuerdo, y dime, de qué te ha servido? Que has aprendido en este tiempo de relativa soledad…?”

-“Al parecer, nada. Tan es así, que no dejo de lamentarme un día, y ahora que has revivado su recuerdo, las imágenes de otras con las que he compartido mi vida se vuelven tenues e insuficientes, y encuentro que, de algún modo, las lastime como jure no volver a hacerlo, por ella”.

-“…Y es por ello que debo castigarte. Verás, yo soy un mismo sentimiento que te evocaría el feliz recuerdo, pero, cuando ha pasado tanto tiempo de un suceso así, y aquél que lo sufre nada ha aprendido, es que debo vengarme por no apreciarme, como hice con el sujeto que deliberadamente quemaste aquí. Se que entendiste el simbolismo, así que creo que, al final, has algo nuevo aprendido. De modo de que te ofrezco la alternativa. Deseas intentarlo de nuevo, una ultima vez…o, prefieres recibir el castigo que mereces, por no tratar…?”

 

Esa noche, quedé ciego, y menos vivo de lo que vagamente desperté, pero el hecho es que creo que tome la decisión correcta, lo que debía ser. Ahora, dejo de ti la lección que espero hayas aprendido, de otro modo, te verás en algún momento en la misma situación que hoy he descrito. Solo puedo advertirte que no esperes a que, al voltear a un muro sangrante de dolor, escrito con tus ojos y sangre, la temida frase, que; créeme que así lo hará,  será lo ultimo que sabrás; se dibuje ante los ojos de un extraño, y lo confunda, versando en su mente:        

“ME CONOCES”…?

 

 

KraD RaetsHiam

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Ahora que el mundo puede tornarce de un multicolor que no se ha visto antes... y que no se aprecia comunmente: Francomero Perecedero de Ilusiones(between heaven and hell), un sitio de matices multiples que no marcan un entorno diferente, pero que hablan con un sentimiento que todo mueve. Otra vieja conocida que la realidad revuelve.

...The Worst Foe Lies Within The Self...

...As the Purest Spirit Isn´t Within...
kRad RaetsHaiam